Hypericum perforatum
también conocida como hipérico, hipericón, corazoncillo o hierba de San Juan, es la especie más abundante de la familia de las hipericáceas.
Los pétalos de la flor son de color amarillo dorado, con pequeñas motas negras en sus bordes, el apelativo latino perforatum
proviene de las pequeñas perforaciones -en realidad son bolsas de
aceite esencial- que pueden verse al trasluz en cada una de las hojas de
esta planta. Son el doble de largos que los sépalos.
Una peculiaridad de esta hierba es que, al aplastar entre los dedos
alguna de sus hojitas, deja una mancha en la piel, su savia anaranjada.
Hypericum perforatum es una planta medicinal con múltiples aplicaciones. Por ejemplo, su aplicación tópica sirve para acelerar la cicatrización de las heridas.
Sin embargo, las propiedades de esta hierba que más han atraído a los investigadores se vinculan con su uso tradicional para el tratamiento de la depresión leve a moderada y la ansiedad. Esta indicación ha sido validada en las últimas décadas por las agencias de salud de algunos países como Alemania, donde ha sido incluida en la farmacopea oficial, y se prescribe ampliamente con ese propósito terapéutico.