3. Cultivos
Un par de curvas más allá, en la dilatación del serpenteante camino se adivinan los restos de dos antiguos molinos de agua hoy poblados por dos enormes eucaliptos que hunden sus raíces en la memoria acuática de estas ruinas, generando una fresca sombra.
Alrededor de este espacio proponemos generar un vórtice para reflexionar sobre el devenir agrícola del Guiniguada. Desde los cultivos de caña de azúcar, pasando por el vino, la cochinilla, los plátanos u otras frutas tropicales recientes. Un proceso directamente vinculado a la construcción de los bancales y de otras infraestructuras creadas por la mano del hombre, como molinos o ingenios, que fueron precisamente construidos aquí por primera vez en las islas.
Intervención efímera
El Guiniguada es hoy una ondulante línea de paisajes que ascienden en secuencia geológica desde el mar hasta el Roque Nublo. Antes fue también la gran máquina hidráulica que permitió procesar los cultivos de su entorno habitado. Acequias, acueductos, bancales, molinos y batanes, quedan como testigos de aquella actividad importante económica de la que dependía el sustento.
Uno de esos molinos hidráulicos es nuestro punto de trabajo. Tiene 300 o 400 años, y estuvo en uso continuado hasta mediados del siglo XX. Del molino quedan sobre todo los surcos del agua en la roca, y las huellas de algunas estructuras abandonadas. Delante pervive en semiruina la casa del molinero, hoy habitada sólo por un enorme eucalipto anclado en el patio.
Delante suyo, un desprendimiento parcial del muro de sillares, abrió una ventana al poniente. Es ahí donde centramos nuestra intervención, tejiendo con cuerdas entrelazadas como las retículas agrícolas, una gran celosía que reconstruye el cerramiento inicial, alongándose al barranco. Sus diferentes texturas juegan con el viento y con la sombra salpicada de las hojas y de las ramas del árbol.
CULTIVOS es una intervención efímera realizada por los alumnos de la EALPGC Anabel García y Sergio López guiada por los profesores Evelyn Alonso y José Antonio Sosa. Dialoga con las presencias, memorias, músicas y sabores desplegadas en este lugar.